Me encanta la leche merengada. Cuando era más joven, recuerdo que cuando venía en verano desde el centro hacia mi casa, paraba siempre que podía en la heladería Isa a tomarme una leche merengada fresquita... y en estos días de calor, no me digáis que no apetece. Pero yo fui un poco más allá: la hice en polos... no os imagináis lo ricos que quedaron.
Cómo? Facilísimo.... toma nota: